Las baterías selladas de plomo son usadas en múltiples aplicaciones y equipos, pero la carga de ellas es un proceso complejo.
Cargar baterías SLA no parece ser difícil, pero lo realmente complicado es maximizar la vida de la batería.
Uno puede usar los simples cargadores de corriente constante o tensión constante, como puede ser conectándola a una fuente de alimentación. La batería se acaba cargando, pero la duración de su vida, los ciclos de carga y descarga que especifica el fabricante se acortarán sustancialmente.
Para conseguir la vida esperada de la batería, deben usarse cargadores inteligentes, lo que al final se traduce en un importante ahorro de costes (y por supuesto, cuidamos el medio ambiente).
Detallemos las técnicas de carga:
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Carga con Tensión Constante. Este método es el más comúnmente usado. Las celdas de la batería dividen la tensión y ecualizan la carga entre ellas.
Es importante limitar la corriente inicial de carga para evitar que se dañe la batería, y en ocaciones el cargador. Con esta técnica no se puede lograr el deseado balance de una carga rápida sin dañar o sobrecargar la batería.
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Carga con corriente constante. Este método se puede usar para cargar una simple celda de 2V, pero no es recomendado para cargar celdas en serie al mismo tiempo, ya que algunas celdas reaccionan al cargarse por completo antes que otras, siendo imposible saber cuando han llegado a su estado de carga completa. Si la carga continúa con la misma corriente por un periodo de tiempo elevado, algunas celdas se sobrecargarán, dañando la batería.
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Carga dos estados tensión/corriente constante. Este método es el ideal para cargar baterías plomo en un corto periodo de tiempo y mantenerlas en una condición de carga flotante.
Otro factor importante en las cargas de batería es la temperatura. Cuando la temperatura aumenta, la actividad química de la batería, también, con lo que la tensión de carga se debe reducir para prevenir la sobrecarga. Si la temperatura disminuye, se debe incrementar la tensión de carga.
El cargador perfecto es aquel que combina las técnicas de carga de corriente constante con el de monitoreo de la tensión de la batería y su temperatura, para reducir el tiempo de carga y todos los estados de estrés de la misma.
La batería puede considerase completamente cargada al llegar al valor de 2.4 v/celda, debiendo en este punto conmutarse a
Carga Flotante monitoreando en todo momento el valores de temperatura.
En la práctica, podemos llegar a prescindir del control de temperatura sin gran incidencia en el tiempo de vida del acumulador.
Otra práctica muy aconsejable es la de la limpieza de la batería. La limpieza interna, no la externa, ojo.
Durante el ciclo de vida pasando por los innumerables procesos de carga/descarga de la batería, las placas se van escamando y los residuos de dioxido de plomo precipitan al fondo del recipiente de cada celda. Estos desechos generan corrientes de fuga entre los electrodos reduciendo la capacidad de autonomía, además de otros problemas.
Por esto, sería conveniente cada 6 a 8 meses, o cuando fuera necesario, vaciar completamente la batería y enjuagarla con agua destilada.
Luego volvemos a colocarle el electrolito, el cual previamente deberíamos colarla con un trapo limpio o mejor aún, colocarle electrolito nuevo.
De todas maneras, cuando no queda otra, todo método que nos permita sortear algún contratiempo, es bienvenida la
mecanica de campo. JEJEJEJE. A pesar de que en realidad Yo juraría que la revista se llamaba
MECANICA POPULAR.
En algún lugar creo que leí que
R=V/I era parte del enunciado de la ley de Ohm.
![Big grin :D :D](data:image/gif;base64,R0lGODlhAQABAIAAAAAAAP///yH5BAEAAAAALAAAAAABAAEAAAIBRAA7)