Conocí al dueño de LEEA personalmente en el año 1990, era un ingeniero que me atendió cuando fui como cliente.
Me hizo pasar a su oficina a mi y a un amigo que me había acompañado a comprar unos componentes.
Le conté lo que andaba buscando y el tipo me empezó a explicar todo lo que tenían y todas las opciones que me podían ofrecer.
Después de la "clase teórica" que me dio sobre sonorización, porque la verdad que explicaba como un profe de la escuela técnica, fuimos a ver la parte práctica.
Nos llevó a una sala de escucha, por decirle de alguna manera, de maso 10x10 metros, toda equipada con materiales acústicos y toda la línea de parlantes que estaban en producción con sus respectivos bafles.
Tenía una consola a botonera en donde cada botón accionaba un bafle diferente. Nos puso un CD de la música que sonaba en esa época, era el chiqui bum chiqui bum chiqui bum, los de esa época se deben acordar de ese ritmo, y entonces te iba haciendo escuchar cada bafle accionando el botón correspondiente.
En ese momento estaban en auge los woofers de rango extendido, que cubrían parte del rango medio, un 15" llegaba a los 6Khz sin problemas y sonaban muy nítidos, pero perdían algo de respuesta en baja frecuencia. Eso te daba la posibilidad de cubrir todo el rango de audio con un woofer y un tweeter.
Lo que tenían esos woofers era una respuesta impulsional muy buena, y eso lo conseguían gracias a que estaban fabricados con una bobina corta, es decir, la altura de la bobina era igual a la altura del entre hierro. Pero no era un capricho de Leea desarrollar ese tipo de woofers, tenía que ver con el ritmo de la música que sonaba en esa época, por eso lo del "chiqui bum" que les mencione, el "bum" era el golpe del bombo y el "chiqui" eran los platillos, y esos woofer daban un golpe de bombo muy notable. Y si usaban un tweeter bala el sonido era impresionante.
Después de escuchar en la sala los diferentes bafles, terminé comprando dos 15-250. Yo ya tenía dos 15-160BF en cajas exponenciales 816 fabricadas por mí. Los 15-250 los terminé poniendo en las mismas cajas que los 15-160 y la diferencia en sonido era notable.
De vuelta en la oficina seguimos charlando, y me contó que las bobinas y los conos eran importados de USA. Recuerdo que me dijo que los conos eran fabricados por Electro Voice, pero eso mucho no se lo creí, pasa que en esos años EV era un referente al que todos se querían parecer y dudé de que los conos LEEA fueran EV.
LEEA en esos años también era representante de la empresa Numark, tenían consolas de DJ y amplificadores. Me mostró todo lo que tenían de la marca, pero las consolas Numark, en aquellos años, eran un referente absoluto en mezcladora de sonido para DJ , yo llegué a tener la DM-1800.
No llegué a conocer la parte de producción, la charla que tuvimos con el ingeniero fue de más de dos horas y ya no daba para seguirla, nos quedó pendiente.
Al final me terminé llevando los dos woofers 15-250, dos drivers de medios, varios tweeters 2001 y una potencia Numark SA-2200.
Hoy me quedó la potencia que todavía la sigo usando, los woofers 15-250 se deterioraron las suspensiones y hay que enconarlos, el resto lo vendí hace años.
Al tiempo vi la publicación de remate por quiebra de LEEA y fue una gran tristeza. Una marca de tantos años y prestigio terminara de esa manera.
Yo creo que llegó a esa situación por la misma razón que llegan muchas empresas manejadas por sus dueños.
Con el correr de los años los fundadores envejecen y no hay nadie en la familia que tenga el interés o la capacidad para continuarla.
Conozco varios casos de esos y en mi familia también.
Otra tristeza fue enterarme que en la pandemia terminó de cerrar la empresa de venta de componentes electrónicos RUAL, en el barrio de San Martín que funcionaba aproximadamente desde los años 70 o antes.
Conocí al fundador de la empresa, que comenzó fabricando televisores y vendiendo repuestos de radio y televisión, luego ya en los 90 se sumó el hijo.
Empecé a comprar componentes ahí por primera vez cuando tenía 11 años, en los 80.
Los kit de Plaquetodo fueron unos de mis primeros pasos en la electrónica, con el amplificador de 8W el TDA2002.
Después de 40 años, todavía lo conservo. Ahí fue donde compré mis primeros LEEA, los 15-160BF y los tweeters de Domo LEEA HFD-40
Nos vamos poniendo viejos y solo quedan los recuerdos de aquellos momentos.
Les subo unas fotos de la bobina original del LEEA 15-250 y la altura comparada con la altura de la placa de campo del entre hierro.
La otra es la potencia Numark de las que vendía LEEA.
Ver el archivo adjunto 306929Ver el archivo adjunto 306928Ver el archivo adjunto 306930
Además de desarmarlos y limpiar la ranura de la bobina porque había viruta metálica. Ahora tienen que llegar a 100 años, por lo menos... jajaja
